Octubre en la copa

Por Nathan Harmon, Chef / Sommelier

Octubre marca un momento especial en el calendario del vino: la vendimia se despide, las uvas tardías alcanzan su madurez y la mesa comienza a vestirse con sabores otoñales.

Este mes abre también el último tramo del año, cargado de celebraciones: primero el misterio de Halloween, luego la gratitud de Acción de Gracias y finalmente, la magia de la Navidad.

Del misterio a la celebración

Cada uva de octubre se convierte en puente hacia las fiestas del trimestre:

Halloween invita a tintos intensos como Syrah o Malbec, copas oscuras que parecen pociones.

Acción de Gracias conecta con la Garnacha y el Tempranillo, vinos versátiles que armonizan con pavo, guisos y mesas abundantes.

Navidad pide elegancia y burbujas: desde un espumoso rosado "festivo" hasta la complejidad de un Cabernet Sauvignon para acompañar cenas memorables.

Un brindis al último trimestre

El último tramo del año está lleno de emociones y brindis. Octubre abre la puerta con vinos que combinan misterio y calidez; noviembre trae la unión en la mesa, y diciembre ilumina con burbujas y grandes tintos. En cada copa hay un recordatorio: el vino es parte de nuestras celebraciones, un hilo que une el misterio, la gratitud y la magia de fin de año.

4 Recomendaciones para disfrutar esta temporada

Las uvas de octubre

En este mes se cosechan variedades que son verdaderos íconos del vino:

Cabernet Sauvignon - potente, estructurado y profundo, ideal para noches frescas.

Nebbiolo - vendimiada tarde en el Piamonte, crea vinos que son pura elegancia.

Tempranillo - en zonas frescas de España aún se recoge en octubre, perfecto para tintos de equilibrio y tradición.

Cabernet Franc - fresco y herbal, evoca el bosque otoñal.

Garnacha - aromática y especiada, un vino cálido como la temporada.